Esta durísima frase me la dijo un sacerdote cuando me estaba confesando hace 20 años. Fue como una cachetada. Yo estaba planteando el tema del perdón a una persona que no se comportaba como mi prójimo. Jesús fue muy claro respecto a quien es nuestro prójimo (Parábola del Buen Samaritano). No toda persona es nuestro prójimo. Si uno no tiene esto bien en claro puede llegar a convertirse en carne que alimente psicópatas...
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